VOLUMEN: VII NÚMERO: 17-18

 

PETER J. LAFRENIÈRE.

“Emotional Development” a biosocial perspective.

EE.UU. Editorial Wadsworth, 2000.

 

Alicia Ballester Comins

Universitat Jaume I de Castellón

 

 

Mediante una completa y sintetizada revisión de las diversos estudios e investigaciones en desarrollo emocional, el autor Peter J. LaFrenière nos presenta un libro de gran utilidad y de lectura obligada para todo aquel interesado en el estudio y reflexión sobre la emoción desde una discusión interdisciplinar. El contenido del libro se expone a lo largo de diez capítulos, los cuales podemos sintetizar en tres secciones temáticas diferentes pero relacionadas: evolución de perspectivas teóricas, desarrollo emocional en la infancia y adolescencia, y diferencias individuales en el desarrollo de las emociones.

Inicialmente, con la finalidad de integrar y comparar las diferentes aportaciones teóricas en una perspectiva biosocial, el autor nos analiza paso a paso los antecedentes históricos, filosóficos y psicológicos en el estudio de las emociones. LaFrenière inicia su estudio a partir de las ideas de Greek y Aristóteles, quienes conceptualizaron la experiencia humana en términos de dualidad mente-cuerpo, razón-pasión, cognición-emoción. Dichos filósofos fueron quienes introdujeron la importancia de las emociones en el proceso de adaptación humana. Aún así, quizás el punto más relevante dentro de la sección de aportaciones teóricas radique en la comparación e integración de perspectivas a partir de un punto de vista biosocial, en el cual se pone en relieve la importancia de factores culturales, sociales, genéticos y fisiológicos en el desarrollo emocional. El autor defiende la importancia de cada una de las teorías analizadas en el estudio del desarrollo emocional, de tal manera que resulta poco productivo descartar unas a favor de otras. Según el momento evolutivo de la persona varía la regulación, expresión y comprensión de las emociones, de tal manera que la relevancia de la intervención genética y de la influencia social está garantizada, de ahí surge la importancia del estudio de la emoción bajo la perspectiva biosocial.

En la segunda sección del contenido expuesto en el libro aparecen características especiales y descripción de las emociones en la infancia y adolescencia. El autor intenta responder principalmente a dos cuestiones: ¿cómo se desarrollan las emociones en el ser humano? y ¿cómo se organiza su desarrollo?. Mientras el autor describe detalladamente las diversas emociones en tales etapas evolutivas observamos cómo la emoción se va convirtiendo en el eje central y promotor del desarrollo psicológico humano.

Y por último, la tercera sección del libro se centra en exponer diferencias individuales en el desarrollo emocional. La mayoría de las investigaciones en relación a este tema, presentadas por el autor, tiene en cuenta la evolución del temperamento infantil y el desarrollo del apego. Adquiere importancia en esta sección de diferencias individuales el desarrollo de la teoría de la mente por parte de los infantes y su relevancia para poseer competencias sociales.

 



 Volver a la Reme